¿Qué es la incontinencia urinaria?

 La incontinencia o incontinencia urinaria es una condición patológica en la que la orina fluye involuntariamente desde el canal uretral. El flujo puede producirse sin ninguna condición previa o tras una repentina necesidad de ir al baño.

Las mujeres son más propensas a la incontinencia. Los médicos lo explican por las diferencias anatómicas entre ambos sexos. En los hombres, la uretra es larga y estrecha, mientras que en las mujeres es corta y ancha. Los músculos del suelo pélvico están más desarrollados en el sexo fuerte. En las mujeres, son más débiles, más propensos a sufrir cambios atróficos con la edad. Además, el músculo pubococcígeo, que controla las contracciones del esfínter, está expuesto a graves lesiones durante el parto. Así, la incontinencia femenina se asocia más a menudo a la debilidad del aparato ligamentoso, mientras que la masculina se desarrolla en el contexto de otras enfermedades.

Las estadísticas aproximadas muestran que la incontinencia afecta a cerca del 20% de la población. Entre los pacientes predominan las mujeres. Se considera que un factor predisponente son los traumatismos del parto y la edad menopáusica. Los trastornos urinarios son un síntoma indicativo de la enfermedad. Sin embargo, la mayoría de los pacientes no buscan ayuda profesional, achacando el trastorno a cambios relacionados con la edad.

La incontinencia es un grave problema médico y social. Los pacientes no sólo sufren molestias físicas, sino también psicológicas. Como resultado de la incontinencia, a menudo se produce desadaptación social y doméstica, pérdida de capacidad laboral. La elección del método de tratamiento de la incontinencia depende de la causa inmediata de la enfermedad.

Clasificación: variedades de incontinencia urinaria

La causa y el mecanismo de desarrollo de la enfermedad permiten distinguir varios tipos de patología.

• Estrés. Se caracteriza por una secreción incontrolada de orina en un contexto de aumento de la presión intraabdominal. Se manifiesta al estornudar, toser, levantar pesos, empujar, cambiar de posición corporal.
• Urgente. Se caracteriza por el vaciado de la vejiga como consecuencia de una contracción brusca del detrusor. Se manifiesta por fuertes deseos de orinar, cuando el paciente simplemente no tiene tiempo de ir al baño.
• Situacional. La incontinencia se manifiesta en determinadas circunstancias (hipotermia, intoxicación etílica, estrés grave).
• Transitoria. Los signos de incontinencia aparecen periódicamente y desaparecen de forma independiente.
• Enuresis. Emisión involuntaria de orina por la noche, mientras que durante el día el paciente es capaz de controlar el proceso.
• Mixta. Hay signos de diferentes formas de incontinencia.

En función de las alteraciones del aparato urinario, se distinguen la incontinencia primaria (desarrollada como consecuencia de una lesión del esfínter) y la incontinencia secundaria (manifestada a pesar del estado normal de los músculos anulares). La incontinencia se denomina falsa si la incapacidad de retener la orina es consecuencia de defectos congénitos y adquiridos de los órganos urinarios. En todos los demás casos, se habla de incontinencia verdadera.

Síntomas de la incontinencia urinaria en hombres y mujeres

El principal signo de incontinencia en un hombre o una mujer es la descarga de una pequeña cantidad de orina al toser, estornudar, sufrir estrés, dormir por la noche o bajo la influencia de otras causas externas o internas. Según el volumen de líquido, la incontinencia se clasifica en formas leves, moderadas y graves. La incontinencia también está indicada por los siguientes síntomas:

• Secreción de orina fuera de la urgencia;
• goteo de orina después de vaciar la vejiga;
• micción después de una micción retardada (la persona intenta orinar de forma ineficaz, pero la micción se produce de forma incontrolada algún tiempo después de un intento controlado).

Todos los síntomas anteriores son una buena razón para acudir al urólogo lo antes posible.

Causas de la incontinencia urinaria

Entre los hombres, predominan las siguientes causas de incontinencia:

• Patologías de la vejiga, uretra, uréteres, próstata (la hiperplasia prostática es especialmente frecuente como causa de incontinencia);
• Enfermedades graves del sistema nervioso central (esclerosis múltiple, malformaciones congénitas, traumatismos, intoxicaciones);
• Intervenciones quirúrgicas en la uretra, próstata, vejiga;
• Trastornos circulatorios en la pelvis
• Enfermedades tumorales;
• Infecciones urogenitales;
• Desplazamiento de órganos internos, que provoca presión sobre la vejiga;
• Efectos de la radioterapia y la quimioterapia;
• Trastornos psiquiátricos;
• Anomalías congénitas de las vías urinarias.

La incontinencia urinaria en las mujeres puede deberse a anomalías anatómicas en los órganos pélvicos, resultantes de traumatismos en el parto, obesidad, ligamentos debilitados, actividades deportivas profesionales o herencia agravada (displasia del tejido conjuntivo). Los cambios en la sensibilidad de los receptores vesicales se producen en el contexto de enfermedades inflamatorias crónicas, intervenciones quirúrgicas y complicaciones posparto.

La razón del desarrollo de la incontinencia urinaria en mujeres mayores y, en parte, en hombres es la disminución del nivel de hormonas sexuales con la edad, que provoca cambios atróficos en las membranas de los órganos urinarios y el debilitamiento del aparato ligamentoso del suelo pélvico. El problema también puede ser consecuencia de enfermedades neurológicas, lesiones del sistema nervioso central y periférico en el contexto de tumores, traumatismos, procesos degenerativos.

Diagnóstico de la incontinencia urinaria

El diagnóstico de la incontinencia comienza con la recogida de la anamnesis. El urólogo aclara al paciente las características específicas de los trastornos, en qué situaciones se observa el vaciado involuntario, cuánta orina se excreta, qué sensaciones preceden a la micción. Para determinar con precisión el tipo y la gravedad de la incontinencia, el médico recomienda que el paciente lleve un diario de micciones durante 3-7 días. El examen físico del hombre lo realiza un urólogo. Las mujeres también deben consultar a un ginecólogo.

El diagnóstico de laboratorio incluye un análisis de orina, que permite excluir patologías renales e infecciones urológicas. En presencia de molestias generales, también se prescriben análisis de sangre y se realizan consultas con especialistas especializados.

Para evaluar la función de la vejiga, se determina el volumen de orina residual (mediante ecografía) y se realiza un estudio urodinámico completo. En algunos casos, está indicada la cistoscopia -examen de la mucosa vesical desde el interior mediante un endoscopio introducido a través de la uretra.

Métodos de tratamiento de la incontinencia urinaria en hombres y mujeres

La elección del tratamiento de la incontinencia urinaria en hombres y mujeres depende en gran medida de su tipo, causa, síntomas principales: la corrección de la incontinencia de esfuerzo difiere de la eliminación de la forma nocturna. Los médicos utilizan medicamentos, fisioterapia y métodos quirúrgicos. La eficacia del tratamiento conservador es mayor en pacientes con formas no tratadas de la enfermedad.

Tratamiento conservador

La terapia conservadora comienza con cambios en el estilo de vida. Los médicos recomiendan:

evitar hábitos poco saludables.

• minimizar el consumo de té, café y otras bebidas diuréticas;
• mantener un régimen de bebida
• evitar esfuerzos físicos intensos;
• garantizar una actividad moderada a lo largo del día
• ir al baño a intervalos regulares;
• utilizar compresas urológicas durante el tratamiento.

El tratamiento farmacológico depende directamente de la causa y el mecanismo de la incontinencia. El esquema terapéutico puede incluir antibacterianos, psicotrópicos, sedantes, antidepresivos, fármacos que inhiben la actividad espontánea del detrusor (el músculo que contrae la vejiga), etc.

Para aumentar la eficacia del tratamiento farmacológico, se prescriben procedimientos fisioterapéuticos. La LFK para la incontinencia urinaria en mujeres incluye la realización de ejercicios de Kegel destinados a fortalecer el músculo del entrecejo. En la menopausia, los fármacos locales que contienen estrógenos se añaden al esquema de tratamiento de la incontinencia.

Si los métodos conservadores resultan ineficaces, puede ser necesaria una intervención quirúrgica.

Tratamiento quirúrgico

La cirugía suele estar indicada para la incontinencia urinaria de urgencia asociada a una mayor actividad del detrusor. Las intervenciones con cabestrillo de bajo traumatismo, que consisten en colocar una malla de implante alrededor del canal uretral, están bien establecidas. Sus bordes se estiran de forma que se garantice una presión suficiente en el canal uretral y la retención de la orina.

El método de inyección para eliminar la incontinencia tiene un efecto temporal. Se inyecta ácido hialurónico o grasa del propio paciente en la zona periuretral. Estas inyecciones proporcionan una compresión dosificada del canal y evitan las "fugas" de orina. En casos graves, se implanta un esfínter urinario artificial, cuya actividad puede controlar el paciente de forma independiente.

Qué hacer para prevenir la incontinencia urinaria en hombres y mujeres

Para prevenir el desarrollo de la incontinencia urinaria en hombres y mujeres, es necesario comprender las causas de esta patología y eliminar en la medida de lo posible los factores que la provocan:

• vaciar la vejiga con regularidad
• beber suficiente líquido;
• evitar hábitos poco saludables;
• llevar un estilo de vida moderadamente activo
• evite la hipotermia;
• no levante pesos pesados
• realizar ejercicios para fortalecer el suelo pélvico;
• tratar a tiempo cualquier enfermedad.

Es importante comer bien, evitar el estrés y el exceso de trabajo.

Tratamiento de la incontinencia urinaria con suplementos naturales

Los suplementos dietéticos naturales tienen muchas ventajas sobre los tratamientos convencionales, como los medicamentos, debido a su composición natural, que ayuda a mejorar el rendimiento general del organismo. Estos suplementos, elaborados con ingredientes puros, seguros y ecológicos, proporcionan una regulación natural de la función urinaria para ayudar a recuperar el control sobre el proceso de micción.

Es importante recordar que antes de empezar a tomar cualquier producto nuevo, incluidos los suplementos naturales, debe comentarlo con su médico. Juntos podrán determinar si este método de tratamiento es adecuado para usted y cuáles pueden ser los posibles efectos secundarios. Además, aunque los suplementos naturales pueden ser eficaces para tratar la incontinencia urinaria, no deben sustituir a los tratamientos médicos tradicionales sin consultar antes con su médico.

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